Dropshipping y otros métodos de venta online de cerámica en el mercado italiano

Dropshipping: presente en el mercado italiano

La distribución cerámica tradicional en Italia tiene unas raíces históricas tan profundas que ni siquiera un evento como la Covid19 ha podido destruir, y por supuesto, todavía hay miles de clásicas tiendas físicas en todo el territorio nacional.

Sin embargo, nos estamos encontrando con una marcada aceleración en la aparición de nuevos sitios de comercio electrónico especializados en la venta de azulejos por parte de operadores ya presentes en el sector que utilizan el fenómeno “dropshipping”, donde solo se envía lo solicitado por el cliente, pero sin tener stock, situándose el ecommerce como puro intermediario.

El almacén, por lo tanto, es solo virtual, lo que no exige compromiso financiero en capital de trabajo y el portal web se presenta como un mero escaparate, equipado con la funcionalidad de pago.

El propietario de los productos en venta es el dropshipper, o la empresa proveedora, con la que el vendedor ha establecido un acuerdo contractual más o menos estructurado, y que puede ser un fabricante o un mayorista, y habitualmente este será el encargado de gestionar el pedido y entrega de la mercancía al cliente final. Por tanto, los ingresos derivados de la venta se reparten entre el comercio electrónico y la empresa proveedora, según porcentajes preestablecidos.

 

Otros métodos de venta online

En el distrito de Sassuolo también hay muchas otras empresas comerciales, algunas sin marca y otras con marca, que en cambio tienen su propio almacén físico (muchas nacieron como mayoristas ‘outlet’ especializados en stock de productos obsoletos, pero que también venden productos actuales con buenas promociones (debemos recordar que los fabricantes nunca publican sus listas de precios).

Un segundo tipo, agrupa distintos productos de distintos productores pero en los que no se publican precios, sino que hay que solicitar presupuesto a través de la web y el comerciante aparece como mediador. Lo mismo hacen algunos grandes minoristas regionales, tipo Fissore en Piemonte, que son capaces también de vender, de esta manera, fuera de su radio territorial.

Finalmente, estamos observando cada vez con mayor frecuencia, intentos de «reconversión» por parte de agentes comerciales, que no pueden viajar, tanto de Italia pero sobre todo del extranjero.

 

El inicio de los fabricantes italiano en la venta directa al consumidor

Una empresa de comercio electrónico puede concentrar la disponibilidad de muchos productores en un catálogo virtual infinito, inutilizar agentes y comerciales, frustrar exclusivas y protecciones territoriales con distribuidores tradicionales y todo eso sin obviar que quien compra azulejos para rehacer un baño no es un cliente que repite cíclicamente pedidos como quien compra ropa o comida.

Quienes venden online no tienen la problemática de los fabricantes respecto a que los hornos se mantengan llenos por lo que se pueden permitir hacer una venta al por menor, con ventas mucho más fraccionadas. Esto no se lo pueden permitir los fabricantes.

La entrega rápida por mensajería de una muestra y la selección de productos no identificables son las ‘killer apps’.